Salsa de Tomate Casera sin Azúcar
Índice
Muchas salsas de tomate comerciales incluyen azúcar añadido, lo cual puede ser un problema para quienes buscan una dieta más natural o controlar su ingesta de azúcares. Preparar tu propia salsa de tomate en casa es una excelente manera de disfrutar de este ingrediente básico sin los azúcares no deseados, y te sorprenderá lo fácil y delicioso que puede ser.
Ingredientes
- 4 tazas de tomates maduros, pelados y cortados en cubos (puedes usar tomates en conserva si están fuera de temporada)
- 2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
- 1 cebolla mediana, finamente picada
- 2 dientes de ajo, picados
- 1 hoja de laurel
- Sal y pimienta al gusto
- Especias opcionales: orégano, albahaca, tomillo (frescos o secos)
Paso a Paso
Paso 1: Preparar los Ingredientes
- Pelar y cortar los tomates en cubos. Si usas tomates frescos, puedes escaldarlos primero para pelarlos fácilmente.
- Picar la cebolla y el ajo finamente.
Paso 2: Cocinar la Cebolla y el Ajo
- Calentar el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio.
- Añadir la cebolla picada y cocinar hasta que esté transparente.
- Agregar el ajo picado y cocinar por un par de minutos más, evitando que se queme.
Paso 3: Añadir los Tomates
- Incorporar los tomates cortados en cubos a la sartén.
- Añadir la hoja de laurel y las especias elegidas.
- Sazonar con sal y pimienta al gusto.
Paso 4: Cocinar la Salsa
- Dejar que la mezcla hierva suavemente, luego reducir el fuego y cocinar a fuego lento.
- Remover ocasionalmente, cocinando por al menos 30 minutos o hasta que la salsa espese a tu gusto.
- Retirar la hoja de laurel antes de usar o almacenar la salsa.
Paso 5: Almacenar o Servir
- Dejar enfriar la salsa si planeas almacenarla.
- Guardar en recipientes herméticos en el refrigerador por hasta una semana o congelar para una conservación más larga.
Consejos para un Resultado MMMM...
- Usa tomates de calidad: El sabor de tu salsa dependerá en gran medida de la calidad de los tomates. Los tomates frescos y maduros son ideales, pero las conservas de buena calidad también pueden funcionar bien.
- Ajusta las especias: No dudes en experimentar con diferentes hierbas y especias para adaptar la salsa a tu gusto.
- Cocina a fuego lento: Permitir que la salsa cocine lentamente ayuda a desarrollar profundidad en el sabor.
- Evita las sartenes con antiadherentes industriales: cura tu propia sartén de hierro o acero inoxidable.
Subir
Deja una respuesta