Los efectos inmediatos de una bebida de cola en mi cuerpo

Beberse una lata de refresco de cola es algo de lo más habitual en cualquier rincón del planeta. Aunque a simple vista parece un gesto inocente, lo que ocurre en tu cuerpo justo después de tomarla puede llegar a ser bastante impactante. Vamos a ver qué le pasa a tu organismo en la primera hora después de tomarte una cola.

En los primeros 10 minutos: Un tsunami de azúcar

El golpe inicial

Nada más dar el primer trago, tu cuerpo recibe 10 cucharaditas de azúcar, que es justo la cantidad máxima recomendada para todo el día. Que no te entren ganas de vomitar con semejante subidón de dulce se debe al ácido fosfórico que lleva la bebida, que disimula un poco el sabor y hace que te lo puedas beber sin más.

A los 20 minutos: Pico de insulina y reserva de grasa

Reacción metabólica

Tu cuerpo responde a este aluvión de glucosa con una descarga potente de insulina (pico de insulina). El hígado se activa y empieza a convertir todo el azúcar disponible en grasa. Y en estos momentos, tiene azúcar de sobra para escoger.

A los 40 minutos: La cafeína hace su efecto completo

Los vaivenes de la cafeína

Ya a esta altura, la cafeína se ha absorbido del todo en tu organismo, haciendo que tus pupilas se dilaten y que tu presión arterial suba. El hígado reacciona a esto liberando más azúcar al torrente sanguíneo. Además, los receptores de adenosina en tu cerebro, que normalmente te harían sentir cansancio, están bloqueados.

Alrededor de los 45 minutos: Sube la dopamina

Bienestar momentáneo

La dopamina inunda tu cerebro, activando los centros de la felicidad. Esta reacción es parecida a la que provocan drogas duras como la heroína, dejándote una sensación de euforia, felicidad y bienestar momentáneo.

Pasada 1 hora: Llega el bajón

El desplome

Y al final, llega el temido bajón de azúcar. Te empiezas a sentir chafado, sin energía, justo cuando el efecto burbujeante del azúcar y la cafeína se va pasando y acabas más cansado y hasta un poco de mal humor.

Las bebidas de cola con edulcorantes artificiales

A menudo presentadas como una opción más saludable frente a sus contrapartes azucaradas, también plantean preocupaciones para la salud según diversas investigaciones científicas. Aunque no contienen azúcar y por lo tanto ofrecen una alternativa baja en calorías, los estudios sugieren que el consumo de edulcorantes artificiales puede tener efectos adversos en el organismo. A continuación, se detallan algunos de los motivos basados en la información científica disponible:

1. Alteración del Microbioma Intestinal: Investigaciones han demostrado que los edulcorantes artificiales pueden alterar la microbiota intestinal, es decir, el conjunto de microorganismos que viven en nuestro intestino. Un estudio publicado en la revista "Nature" (Suez et al., 2014) encontró que el consumo de edulcorantes artificiales, específicamente sacarina, sucralosa y aspartamo, puede inducir intolerancia a la glucosa al alterar la microbiota intestinal. Esta alteración podría afectar la manera en que el cuerpo procesa el azúcar, aumentando el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
2. Riesgo Incrementado de Enfermedades Metabólicas: A pesar de que se comercializan como herramientas de ayuda para la pérdida de peso, algunos estudios sugieren que el consumo de edulcorantes artificiales puede estar asociado con un mayor riesgo de desarrollar condiciones metabólicas como obesidad, síndrome metabólico y diabetes tipo 2. Un estudio publicado en el "Journal of the American Geriatrics Society" (Fowler et al., 2015) observó que el consumo regular de bebidas dietéticas estaba asociado con un incremento significativo en la circunferencia de cintura en adultos mayores.
3. Asociación con Cambios en el Apetito y la Satisfacción: Algunas investigaciones sugieren que los edulcorantes artificiales pueden afectar los mecanismos de recompensa y satisfacción en el cerebro, potencialmente llevando a un aumento en la sensación de hambre y a un consumo calórico mayor en otras comidas. Esto se debe a que el cuerpo espera recibir calorías tras el sabor dulce, y cuando estas no llegan, puede generar una compensación incrementando el apetito.
4. Posibles Efectos Cardiovasculares: Un estudio publicado en la revista "Stroke" de la American Heart Association (Pase et al., 2017) sugiere que hay una asociación entre el consumo elevado de bebidas dietéticas y un incremento en el riesgo de accidente cerebrovascular y demencia, aunque se necesitan más estudios para comprender completamente esta relación.

Es importante mencionar que, aunque existen estos estudios, la investigación aún está en curso y los efectos a largo plazo del consumo de edulcorantes artificiales en la salud humana continúan siendo un tema de debate científico. La moderación es clave, y es recomendable optar por agua y otras bebidas naturales sin azúcar, como por ejemplo infusiones diversas para según qué momento del día.